CRUCIFICADO DE SAN JOSÉ

Cruzificado de San Jose

El Crucificado de San José es la última imagen que recibe la cofradía. Se trata de una talla anónima, de principios del siglo XX, que ha sido depositada en la cofradía con el objetivo de dar culto a este crucificado.

La cofradía, en el seno de este depósito, acuerda procesionarlo el Martes Santo, en el Sermón de la Soledad y Rosario de Soledad y Esperanza, que procesiona el Martes Santo desde el Hogar de San José de Hermanitas de Ancianos Desamparados, en un nuevo conjunto escultórico denominado María al Pie de la Cruz y que está formado por este crucificado que mira directamente a su Madre, la Virgen de la Esperanza que está rodeada de ángeles.

Artísticamente hablando, se trata de un crucificado de madera, de pequeño formato, y que en su origen formaba parte del ajuar devocional de un particular hasta que fue recibido por la cofradía.

Actualmente, la cofradía no tiene preparado ningún culto en su honor, aunque es intención de la hermandad nombrarlo como imagen de devoción y realizar alguna celebración litúrgica en su honor.

Si bien, desde el Sábado de Pasión (anterior al Domingo de Ramos) y hasta el Domingo de Resurrección, se encuentra en veneración permanente en el Hogar San José de Hermanitas de Ancianos Desamparados.